Moat, un término repetido hasta la saciedad por Warren Buffet. Según el oráculo de Omaha, aquellas empresas que tienen un moat profundo, tienen algo así como el Santo Grial de la inversión. 

Pero, ¿qué es un moat?, y según Warren Buffet, ¿qué características tiene que tener una empresa para que podamos afirmar que tiene un Moat profundo?. En este artículo te damos todas las claves, además de indicar algunos ejemplos de acciones con moat profundo de la propia cartera de inversor nonagenario. 

¿Qué es un moat? | Traducción y significado

Realmente para hablar de moat tenemos que retrotraernos hasta la Edad Media. Y es que en su origen etimológico la palabra moat proviene del inglés antiguo y originalmente se refería simplemente a una zanja

Por ende, un moat es un foso o zanja profunda y ancha, normalmente llena de agua, que se excava y suele rodear un castillo, una fortificación o una ciudad, y que se utiliza como defensa contra los ataques. De esta forma, los fosos anchos rodeaban los castillos para dificultar que un atacante se acercara lo suficiente a las murallas como para traspasarlas. Los atacantes tendrían que rellenar primero el foso antes de poder empezar a escalar las murallas o siquiera acercar las máquinas de asedio o los arietes se acercaran a las murallas.

¿Qué es el moat de una empresa según Warren Buffet?

Hoy en día, el término «moat» se utiliza a menudo en sentido figurado para referirse a cualquier ventaja competitiva que una empresa tenga sobre sus rivales, creando cualquier tipo de barrera que les dificulte el acceso

Por ejemplo, Warren Buffet ha dicho que el moat o foso de una empresa es el factor más importante a tener en cuenta a la hora de invertir. Él busca empresas con fosos fuertes que las protejan de la competencia y les permitan generar beneficios a largo plazo.

En su carta anual a los accionistas, Buffett habla de su filosofía de inversión, que ha bautizado como «The Moat Approach«. Esta estrategia se centra en encontrar empresas con ventajas competitivas sostenibles, a las que se refiere como «moats». Al invertir en empresas con ventajas competitivas duraderas, Buffett ha sido capaz de generar importantes rendimientos para él y sus inversores a lo largo de los años.

Estos fosos pueden adoptar cuatro formas de ventaja competitiva, que a continuación vamos a ver.

¿Cómo se genera un moat profundo? | Las 4 ventajas competitivas

Si buscamos invertir como Warren Buffet, debemos buscar las siguientes 4 ventajas competitivas que puede desarrollar una empresa. Cuantas más desarrolle y de forma más profunda, mayor será el foso de esa empresa, y por tanto, sus acciones más atractivas. Las cuatro ventajas competitivas que generan mayor moat son

  • El valor de la marca
  • La ventaja de los costes
  • La protección normativa 
  • Los efectos de red. 

El valor de la marca

El valor de una marca es la diferencia entre el precio de un producto genérico y el precio del mismo producto con la marca asociada, e Incluye las percepciones de los clientes, tanto actuales como potenciales, sobre dicha marca. 

Dicho de otro modo, el valor de la marca suele medirse por lo que la gente está dispuesta  a pagar por un producto o servicio con el nombre de la marca, en comparación con un producto similar sin el nombre de la marca.

En consecuencia, un fuerte valor de marca puede dar a una empresa una ventaja sobre sus competidores. Los clientes son más propensos a elegir productos con marcas conocidas y de confianza. Esto permitirá a la empresa blindarse frente a la competencia adquiriendo un mayor moat para alcanzarla.

De hecho, el valor de la marca es importante para que las empresas mantengan y hagan crecer sus negocios. El valor de la marca se construye con el tiempo a través de las relaciones con sus clientes, las experiencias positivas de los mismos y la coherencia de la marca. 

La ventaja de los costes operativos y para el cliente

En este sentido podemos afirmar que las empresas con mayor coste son o bien aquellas que pueden acceder a un coste operativo menor, o bien a un coste de sustitución para el cliente mayor. Veámoslo:

Costes operativos

En algunas industrias es casi imposible diferenciar, razón por la cual las empresas que operan en estas industrias son price-takers y será el mercado quien determine el precio de sus productos. En este sentido podemos hablar de industrias como la de las materias primas, logística o  aerolíneas. 

Si una empresa que opera en estas áreas tiene la capacidad de tener costos más bajos que sus competidores, podrá ofrecer sus productos a precios más bajos para atraer la demanda de sus productos/servicios, ampliando su moat respecto a la competencia. 

Aerolíneas como Ryanair (RYA.IR), han sabido extraer de la ventaja competitiva en costes y precios bajos. Su bandera de reconocimiento para el consumidor final frente a la competencia, así pues, pensar en aerolíneas baratas, es pensar en Ryananir. 

Coste de sustitución

Algunos productos o servicios, una vez contratados, son casi imposibles de abandonar. Ya sea el coste económico o, sobre todo, debido al tiempo y esfuerzo que requiere cambiar de producto para encontrar esas mismas prestaciones. 

Dado que el coste de sustitución para el cliente es muy alto, preferirá seguir usando el mismo producto aunque sea un poco más caro.

En este sentido un buen ejemplo es la empresa Adobe (ADBE), empresa proveedora de programas de software como Photoshop, InDesign o Premiere. Debido a que ofrece un servicio difícil de sustituir, la mayoría de clientes prefieren pagar un precio más caro, pero tener acceso al mejor servicio posible. El foso que se le genera a esta empresa es brutal y pone en serios aprietos a la competencia. A esta no le queda más remedio que buscar otros nichos que no sea la excelencia en el servicio, como Canva que busca la intuición. 

Protección normativa

La protección normativa o reglamentaria es un tipo de protección legal que está diseñada para salvaguardar a las empresas y a otras organizaciones de las acciones de su competencia. Esta protección puede adoptar la forma de legislación, sentencias judiciales u orientaciones de agencias. 

El propósito de la protección reglamentaria es garantizar que las empresas puedan operar sin temor a la interferencia del mercado. Por ejemplo, este tipo de protección es importante para empresas que requieren altas sumas de inversión en I+D para la investigación de un producto. Por ende, si se les concede una patente de explotación, les puede empezar a resultar mucho más atractivo destinar grandes cantidades de dinero a dicha inversión. 

Un ejemplo de esto sería el sector farmacéutico, donde empresas como Moderna (MRNA) o Astrazeneca (AZN.L), han conseguido la patente de la vacuna del Covid-19 para muchos años, creando un auténtico foso, que directamente impide a la competencia investigar esa línea de productos, y ofreciéndoles a las empresas ya mencionadas toda la ventaja competitiva del sector. 

El Efecto Red

El efecto red es un fenómeno por el que un bien o servicio se vuelve más valioso cuando más personas lo utilizan. Esto se debe a que el efecto red aumenta el valor de dicho producto o servicio a medida que aumenta el tamaño de la red. 

Dado que las redes más grandes suelen ser más útiles que las más pequeñas, esto suele conducir a un bucle de retroalimentación que se refuerza a sí mismo, en el que las redes más populares se vuelven aún más valiosas, mientras que las redes más pequeñas luchan por competir en la parte baja del foso. El efecto red cuando se utiliza con prudencia, puede conducir a un crecimiento exponencial y a la adopción generalizada de nuevas tecnologías. 

Por ejemplo, el efecto de red puede verse en las plataformas de medios sociales como Meta Platforms (META) y Twitter (TWTR), que se vuelven más atractivas para los usuarios a medida que más personas se unen a ellas. Del mismo modo, los marketplace como Alibaba (BABA) o Amazon (AMZN) se vuelven más útiles a medida que más vendedores y compradores se unen a ellos.

Y estas serían, en definitiva, las cuatro ventajas competitivas que una empresa debe luchar por conseguir para granjearse un foso profundo o moat, que a la competencia le cueste mucho enterrar.

Ejemplo de moat, la cartera de Warren Buffet

Si Warren Buffet ha sido uno de los inversores más rentables de todos los tiempos, llegando a conseguir una rentabilidad anualizada del 20%, en los últimos 55 años, aplicando la filosofía de inversión moat approach, es porque no es precisamente palabrería barata, así que vamos a echar un vistazo a su cartera: 

Cartera de Warren Buffett

Durante muchos años esta fue la configuración de la cartera de Warren Buffet y lo primero que debe llamarnos la atención son dos empresas con una posición privilegiada en el mercado, Apple (AAPL) y VISA (V). Vamos a verlas

Apple

La empresa de la manzanita tiene claras ventajas competitivas en:

  • Valor de marca, ya que cada vez que saca un producto, es uno de los acontecimiento del año generando colas de ansiosos por poder comprarlo.
  • Costes de sustitución, ya que es bien sabido que aquellos que prueban el Iphone, difícilmente quieren después volver a usar cualquier smartphone de la competencia.

Como ya habrás podido deducir, el foso de Apple, es muy profundo y prácticamente infranqueable. 

Visa

En este caso, la empresa de las tarjetas de crédito más usada cuenta con un profundo foso, debido a dos ventajas competitivas:

  • Valor de marca, donde prácticamente pensar en tarjetas de crédito es directamente pensar en Visa. Se podría decir que Visa es el top of mind de la categoría de producto.
  • Efecto Red, evidentemente esta es la ventaja competitiva que más valor da a la compañía americana. Su tarjeta es prácticamente utilizada en todo los países, y por ende, aceptada en cualquier parte del mundo. Y recuerda, cuanto más grande es la red, más valor adquiere la empresa. 

Como bien hemos podido ver, los fosos son muy importantes, ya que al confiar muchos clientes (e inversores) en ellas, no solo capean mejor los tiempos de inflación, sino que suponen un refugio (incluso atractivo)para la mayoría de inversores. Y como bien afirmamos en nuestro curso de bolsa, tenemos que estar donde estén los ganadores, es decir, en aquellas empresas con fosos profundos. 

En definitiva, un moat es un foso que la empresa ha conseguido crear para la competencia. Mientras la empresa con moat, se queda la mayor parte del mercado en la parte alta, el resto de sus competidores, luchan por las migajas en la parte baja del foso.