Una empresa es una organización que tiene por objetivo obtener beneficios satisfaciendo una necesidad del mercado. A tal fin, ofrece productos y servicios a cambio de un pago. Las empresas se clasifican por su tipo de actividad en tres sectores: el sector primario si es agrícola, el sector secundario si es industrial y sector terciario si ofrece servicios).

Las empresas tienen marcos de actuación limitados por los mercados. Por lo general, los límites son:

  1. Geográficos: la empresa ejerce su actividad en un determinado territorio, si bien puede producir en uno  o varios sitios, vender en otros y gestionar los procesos en otros. Cada territorio tiene su legislación y sus tasas impositivas, a tener en cuenta en el proceso de producción, distribución y venta.
  2. Conceptuales: la empresa debe delimitar sus productos y servicios y adaptarlos conceptualmente al mercado al que los dirige: no es lo mismo vender naranjas en Valencia, que venderlas en Moscú, ni venderlas a pie de calle que por internet. Además, también ha de contraponerse y diferenciarse de la competencia.

¿Qué es una empresa? Definición

Una empresa es una entidad autónoma de producción de bienes o servicios, en la que se integran de forma coordinada diversos elementos (fuerza de trabajo, herramientas y medios de producción) bajo la dirección de los empresarios. Los empresarios son las personas físicas o jurídicas que ejercitan en nombre propio una o más actividades productivas dirigidas al mercado, es decir, aquellos que realizan las actividades empresariales.

La finalidad inmediata de la empresa es producir bienes y servicios para satisfacer determinadas necesidades del mercado y la finalidad mediata, suponiendo que se trate de empresas mercantiles, obtener alguna clase de utilidad o lucro para sus propietarios.

Elementos de las empresas

Las empresas disponen de una serie de medios o factores para cumplir sus objetivos y desarrollar sus actividades, que se pueden dividir en dos grandes grupos: los factores activos (personas) y los factores pasivos (bienes económicos). Los factores activos forman las dinámicas de las empresas, y son aquellos que, empleando los factores pasivos para poder llevar a buen puerto las actividades de la empresa y cumplir sus objetivos.

Las personas

Dentro del grupo humano que conforma una empresa, podemos señalar la existencia de grupos diferenciados por sus intereses y relaciones con los otros grupos:

  1. Los socios, que son los propietarios del capital social de la empresa.
  2. Los administradores/directivos, que, nombrados por los socios, son los encargados de dirigir la empresa.
  3. Los trabajadores, que son los que emplean su fuerza de trabajo para producir productos y/u ofrecer los servicios de la empresa.

Esta división es más propia de las medianas y grandes empresas, ya que en la mayoría de pequeñas empresas hay una convergencia entre los tres grupos en una misma persona (siendo en muchas de ellas el socio el que administra y trabaja haya o no más empleados). Entre el primer y, especialmente, el segundo grupo, surge la figura del empresario tal y como la entendemos.

Los bienes económicos

Los bienes económicos son el conjunto de medios de producción, mobiliario, herramientas y existencias de las que dispone la empresa, y pueden dividirse en bienes de inversión (o duraderos) y en bienes corrientes (o no duraderos). Esta clasificación depende de si estos bienes se transforman o consumen a lo largo del ciclo de explotación.

La organización empresarial

La organización es el conjunto de relaciones de autoridad, coordinación y comunicación que se conforman con la actividad del grupo humano entre sí y con el exterior. Esta estructura la definen los empresarios.

Funciones de las empresas

Funciones generales

La empresa en una economía de mercado cumple con las siguientes funciones generales:

  1. Organizar y dirigir el proceso de producción, teniendo en cuenta los aspectos marcados y regulados por la ley de las instituciones estatales que organizan los territorios en los que realiza sus actividades.
  2. Asunción de los riesgos técnico–económicos inherentes al proceso de producción, matizados por los principios de responsabilidad y control de la empresa.

Estos matices son:

  1. El progreso de las técnicas de gestión, permitiendo mejorar la planificación, programación, presupuestación y control.
  2. La posición de privilegio de la empresa en el mercado.
  3. La dispersión del riesgo al aplicar los fondos financieros a explotaciones diversificadas.
  4. La constitución de empresas multinacionales, así como acuerdos y conciertos de actuación con las mismas.

Funciones específicas

El desarrollo de la actividad empresarial supone el desempeño de numerosas tareas, muchas de las cuales se han convertido en campos especializados del conocimiento. A estas áreas de trabajo especializadas también se les suele denominar “funciones empresariales”. Las funciones empresariales genéricas más importantes son las siguientes:

  1. La dirección de empresas: define los objetivos, los recursos y la organización de la empresa a largo, medio y corto plazo.
  2. La gestión económica y financiera: se encarga de los temas relacionados con la contabilidad, las finanzas y los temas fiscales.
  3. La comercialización: entre otras cuestiones se dedica a la investigación de mercados, la gestión de ventas y el marketing.
  4. La dirección de producción: que diseña el producto, el proceso para realizarlo, y controla la calidad de los materiales y procesos utilizados.
  5. La dirección de recursos humanos: que se encarga, entre otras cuestiones, de seleccionar y formar al personal y de las relaciones laborales.