Objetivo: mantener el riesgo global de cartera constante

Si liberas riesgo en tu cartera, intentaremos comprar otro valor para mantener el riesgo global en el porcentaje establecido.

Una de las opciones para mantener el porcentaje de riesgo de su cartera cuando uno de sus valores libera riesgo es adquirir otra acción.

Planteamos un escenario de inversión para entender como realizar esta gestión.

Tenemos una cartera diversificada. Una de nuestras acciones sube su precio. En ese momento, debemos subir también el stop de salida que la acompaña, estamos liberando así un porcentaje de riesgo que podemos mantener con la compra de otra acción.

Lo vemos con un ejemplo: Inicialmente tenemos 5 acciones diferentes con el mismo porcentaje de riesgo. Sube uno de los valores y deja de tener riesgo porque su precio de stop se ha situado por encima de su precio de compra.
Ha llegado el momento de invertir en una nueva acción.

Adquirimos la 6 acción que, está en riesgo, junto a otras cuatro. Tenemos, además, una quinta acción en nuestra cartera que, había subido de precio y está, en este momento, libre de riesgo.

En definitiva, tenemos una cartera con 6 acciones; 5 de ellas con el mismo porcentaje de riesgo y una liberada de él.

¿Cómo introduzco mi capital en bolsa para minimizar mi riesgo?

Introduzca su capital en bolsa progresivamente y minimizará los riesgos.

No compre todas las acciones en el mismo momento. Entre progresivamente en los diferentes valores que quiera adquirir. No meta nunca todo el capital de golpe.

Si una de las claves del éxito como inversor es reducir los riesgos al mínimo, debemos evitar en lo posible el riesgo de comprar mucho en un mismo momento.

Se trata de una estrategia muy atrevida y nada recomendable porque una persona que introduzca todo el capital en un mismo instante, se expone a que, si ese no era el momento idóneo, le cueste una pérdida demasiado grande.

Diversifique también los momentos de la entrada e introduzca su capital poco a poco. Reducirá así enormemente el riesgo de su cartera.

Deben permitirnos poner stops

No opere en ningún mercado en el que su intermediario no le permita poner stops.

Si lo hace, está usted aceptando que la acción baje a cero y pueda perder todo lo invertido en ese valor.

Debe siempre elegir un bróker que le permita poner stops en todos los mercados del mundo, o al menos, en los que usted opere. Además, debe fijarse en que no le cobre por cancelación o modificación y que las comisiones sean competentes. Hoy sabemos que se pagan infinidad de comisiones por gestiones bursátiles y debemos analizar cuidadosamente cuáles son.

Por eso, le aconsejo que analice tranquilamente a los posibles intermediarios antes de elegir uno.

¿Qué stop es el más aconsejable?

Utilice stops a mercado. Son los más eficaces.

Como hemos comentado en otras ocasiones, los stops en bolsa garantizan el control de las pérdidas. Son, por tanto, sinónimo de tranquilidad y debemos utilizarlos en todas y cada una de nuestras posiciones.
Entre los diferentes tipos de stops que existen, el más aconsejable es el stop a mercado.

Los stops dinámicos o porcentuales suben con las cotizaciones. No dejan, siempre, correr los beneficios porque es probable que nos saquen de una posición en la próxima onda.

Los stops limitados no son stops en esencia, porque, si un valor abre con un GAP, es probable que el stop pierda su función de control.

Sin ningún tipo de duda, el más recomendable, atendiendo a mi metodología y estrategia, es el stop a mercado: cuando el precio sea menor que X, ya no la quiero, ordenamos que se venda al precio que nos den. Y es que, si hemos comprado a 9 y la acción empieza a bajar, este stop nos permite vender cuando lo consideremos. Ha cambiado la tendencia y ya nos debe dar igual si vendemos a 8,95, 8,90 u 8,80. Esa acción ya no la queremos, no tenemos porque aguantarla hasta que llegue al precio que habíamos determinado inicialmente.

Por ello, es necesario poner siempre stops y utilizarlos a mercado.

No opere nunca sin calcular su riesgo

El riesgo está vinculado al nivel de daño psicológico que estamos dispuestos a asumir como inversores. Y no solamente cuando realizamos una operación (riesgo por operación) sino cuando encadenamos una secuencia de ellas (riesgo por cartera).

Por ello, cuando invertimos en Bolsa siempre debemos tener clara cuál es la peor situación posible, es decir, cual es el capital máximo que podemos llegar a perder.

A partir de ahí, la operación está en marcha y simplemente debemos seguir los acontecimientos: si sube, es perfecto; si baja, ya conocemos con exactitud, qué capital vamos a perder.

No realice nunca operaciones sin conocer la peor de las posibilidades.

Gestión del dinero

La gestión del riesgo es de suma importancia.

Debemos tener calculado cuál es la mayor pérdida que puede tener cada operación que hagamos y mantenerla bajo control. Asimismo tenemos que conocer la cantidad de riesgo que corren todas y cada una de nuestras operaciones para saber cuál es la peor situación posible en caso de que nos saltaran todos nuestros "stops" si los mercados viraran de rumbo.

Se ha de prever siempre el peor escenario posible y conocer cuál es el capital máximo que uno puede perder en una operación.

Coloque siempre los stops correctamente

La tranquilidad que da tener stops no es comparable a ninguna otra cosa cuando se invierte en bolsa. No lo dude y utilícelos.

Si los emplea jamás tendrá una acción en su cartera que lo único que hace es acumular pérdidas, que hagan que, mes tras mes, año tras año, baje su valoración bursátil.

Si no los utiliza, pregúntese si vale la pena conservar ese valor. Tal vez si se lo plantea, comprobará que lo que no quiere es sentir que se ha equivocado; puede que su mente se esté aferrando a la posición solo por no aceptarlo.

Acéptelo, sea valiente y diga que se ha equivocado. No siga perdiendo tiempo y dinero en un valor que no le da alegrías. Deshágase de él y encuentre un buen valor en que invertir con éxito.

Gánele la batalla a su mente y salga de ellas. Se sentirá liberado.

No aumentes de golpe el capital de tu cartera

¿Es posible que un ganador con 100.000€ pueda ser un perdedor con 1.000.000€? La respuesta es que sí.

Una de las claves mas importantes en el mercado financiero, es tener el control de nuestros riesgos y nuestros actos. Una persona puede estar muy tranquila manejando 10.000€ o incluso si esta acostumbrada a manejar 100.000€ puede estar tranquila. Por este motivo cuando incremente capital para manejar en su cuenta, hazlo de forma progresiva, y que este porcentaje a su vez, sea pequeño.

Acostumbre a su mente a los nuevos riesgos y a los nuevos capitales. Del mismo modo que si vamos al gimnasio y hoy podemos levantar 20kg, no vayamos a levantar 100kg de golpe; empecemos incrementando a 25kg y cuando lo tengamos controlado, aumentamos a 30kg y así sucesivamente.

Si quisiéramos levantar esos 100kg es muy probable que nos quedáramos en el intento y sería muy posible además que nos lesionáramos para un tiempo o incluso para toda la vida. Lo mismo nos podría ocurrir en el mundo financiero.

No tenga acciones sin stop

El stop nos garantiza que pase lo que pase mañana en el mercado financiero mundial, pasado mañana tendremos dinero para seguir operando.

Se sorprendería de la cantidad de personas que invierten sin stops, e invertir sin stops significa que acepto que la acción que tengo en mi cartera baje hasta cero.

Utilice stops a mercado, es decir, que se venderán en el momento que el valor toque un precio determinado al que mejor pague en ese instante. Tener un stop puesto en el mercado le beneficiará enormemente ya que podrá haber limitado sus riesgos, podrá ir en favor de la tendencia subiéndolo a la vez que lo hace el valor y, lo más importante, saldrá del valor si su tendencia cambia.

Y todo esto lo podrá hacer sin mirar ni la bolsa, ya que cuando salte su stop, quizás usted este trabajando, de vacaciones, con la familia, o lo que le apetezca.

No hay ningún peligro si todo está calculado.

Usted debe conocer la peor situación posible de cualquier acontecimiento de forma particular o de grupo.

En modo de explicación le diré que tenemos que conocer, cual es el capital máximo que yo puedo perder en una operación, y déjeme que le diga que el capital máximo no es la inversión, sino que debería de estar muy por debajo de esta.

Si yo he medido que si me sale mal la operación, es decir, si me salta el stop, voy a perder 200, 500 o 1000 euros, he medido con exactitud el riesgo que estoy corriendo en esta operación en particular.

¿Dónde está el miedo entonces? Si tuve miedo no debí de hacer la operación, pero ahora... Ahora la operación esta en marcha, y no depende ya de nosotros si la acción subirá o bajará. Si sube extraordinario, pero si baja no pasa nada, ya que la peor situación posible la conocía con exactitud cuando acepté la operación.

No realice operaciones sin conocer la peor de las posibilidades y sin aceptarla.

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